Espumas acústicas. Foam – Espuma de Estudio para Acústica

Las espumas acústicas, o foam-espuma de estudio para acústica

Las espumas acústicas (o foam) tienen por cometido -en un estudio- la reducción de rebotes de onda de sonido y absorción de ondas de sonidos, bajos y graves o medio, agudos. Existen para aislamiento sonoro, absorción y amortiguación.

Por una parte están las espumas de poliuretano. Este aislamiento ofrece solo retroalimentación. Otras espumas acústicas fabricadas en lana mineral funcionan para dotar de acústica a un espacio, como puede ser un estudio de grabación.

Es un material absorbente acústico del tipo poroso. Típicamente se trata de poliuretano de celda abierta en base poliéter o poliéster, con densidades que oscilan entre 20 kg/m³ y 30 kg/m³.

Wikipedia

Tipos de espumas acústicas

Los paneles de espumas acústicas ofrecen absorción de bajas frecuencias. Estas foam de estudio son trampas de graves y rebotes de ondas. Los conocidos cubos neutralizan frecuencias y pueden ser tipo onda y pirámide.

Cómo dar acústica a una habitación y convertirla en un estudio de grabación

Fabricadas en lana de roca o fibra de vidrio mejoran el aislamiento acústico.

Por ello, antes de instalar las espumas acústicas es posible tomar una medición de reverberación o rebotes de sonido, para comparar dicha muestra con la que se obtendrá una vez instaladas las espumas acústicas.

Es una pregunta muy habitual para quienes están comenzando en el mundo del home studio. Para dar acústica a una habitación y convertirla en un estudio de grabación decente, hay que tener en cuenta -primeramente- los parámetros físicos del espacio y realizar la prueba anteriormente mencionada.

Entendemos que no se disponer de cabina de locución, por ello necesitamos tratar acústicamente todo el espacio donde grabaremos la voz en off y realizaremos post producción de sonido.

Dar acústica no es insonorizar

No estamos hablando de insonorizar, ese es otro cantar y bastante caro si quieres una buena insonorización. Hablamos de dar acústica al espacio en el que trabajaremos desarrollando labores de grabación, edición y mezcla final de sonido.

Si no lo sabes, el sonido es energía acústica y puede ser convertido a otra energía, inferior en volumen, para que no sea perceptible por el oído humano. Pero el problema es que un micrófono de estudio puede captar ese leve ruido y estropearnos la grabación.

En castellano, la palabra «ruido» procede del latín rugĭtus, que significa «rugido», «bramido», «sonido sordo». … Algunas teorías apuntan que noise podría proceder del latín nausea (del griego nausia, con el mismo significado), término con el que comparte el sentido de «molestia»

¿Qué tipo de espumas acústicas necesito?

Una vez te has decidido a comprar las espumas acústicas, debes tener en cuenta qué tipo de espumas necesitas; y la decisión ha de ser estudiada basándote en el grosor, el diseño, su coeficiente de reducción de ruido y las dimensiones del espacio a cubrir con las espumas acústicas.

Según Ecophon, la norma de ASTM C 423 diferencia dos valores únicos: el NRC (Coeficiente de Reducción de Ruido) y el SAA (Media de Absorción Acústica). Ambos valores se calculan como un promedio sobre el rango de frecuencia (250-2000 Hz y 200-2500 Hz, respectivamente).

Así que el Coeficiente de Reducción de Ruido (NRC ) es una representación escalar de la cantidad de energía sonora absorbida al golpear una superficie particular. Un NRC de 0 indica perfecta reflexión ; un NRC de 1 indica perfecta absorción. Es cuestión de aritmética, así que aplícate si no quieres meter la pata.

Nuestra recomendación es que te intereses por las marcas más conocidas y de prestigio, que te garantizarán que los materiales de las espumas acústicas son de calidad. Existen los Auralex DST 112-114, las SoundTrax PRO, ATS Wedge…

Precio de las espumas acústicas

Llegamos a la pregunta del millón. ¿Cuánto valen las espumas acústicas?. Bien, como en todo depende de lo que quieras y puedas gastarte. Hay espumas muy asequibles, a precios razonables, y hay espumas acústicas caras. Aquí, mirando bien y sabiendo lo que buscas, comprobarás que lo barato a veces sale caro.

Si quieres dar una buena acústica con una espumas de primera calidad, la inversión no será pequeña. Puedes empezar por un pack de espumas acústicas razonable, y tres o cuatro trampas de graves, gastándote alrededor de 300 a 500 euros.

Si quieres algo más avanzado, existen espumas acústicas revestidas de madera con trampas y absorbentes de frecuencias no deseadas que te pueden llevar a gastar miles de euros.

Las de la marca Hofa Akus­tikset Profi son excelentes, el problema es su precio. Si no dispones de algo más de tres mil euros, olvídate.

Packs de espumas acústicas

Intenta que el pack que compres lleve cuantas más piezas mejor, que la calidad sea buena y que te sirva para todo el tratamiento acústico que necesitas. Como mínimo han de llevar:

• Trampa de graves
• Absorbentes de tubo de rango completo para amortiguar frecuencias graves
• Que sean eficaces contra los graves retumbantes y las ondas estacionarias
• Adecuadas para condiciones de trabajo profesional y en salas de grabación y control, así como para placer auditivo de audiófilos
• Placas de cubierta y placas de base hechas de madera multiplex

Ya tengo los paneles ¿cómo los instalo?

Ten en cuenta que si la habitación donde vas a instalar las espumas acústicas es simétrica, quiere decir igual por sus cuatro paredes, será necesario que instales los paneles haciendo que se convierta en asimétrica.

Redondea esquinas y rincones, coloca las foam acústicas para romper rebotes entre tabiques verticales y techos, anula la regularidad de la pared colocando varios paneles separados para que las ondas de sonido que reboten mueran en su intento de complicarte la acústica.

Las foam, o espumas acústica, son parte fundamental para absorbente acústico que te ofrezcan reducción de la amplitud de la onda. Estas espumas acústicas tienen formas piramidales o de alveolos para aumentar la absorción sin ocupar espacio.

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